Hemos llegado de Asia y de Australia recibidas por la alegre y folclórica bienvenida de las hermanas de la Provincia PMPT (Filipinas-Malasia-Papua NG-Tailandia). Junto a la lluvia, frecuente en esta estación, nos han llovido los mensajes de comunión de las hermanas del mundo y de los amigos de la congregación.
Le bellísima Celebración Eucarística de estas dos primeras jornadas, ricas de símbolos, solemnemente cantadas y angélicamente danzadas, nos han puesto en el mejor clima para recibir, el 10 de septiembre, el saludo de la superiora general, seguido de su desafiante relación sobre el proceso de rediseñación de las presencias, que hoy vive toda la congregación. Sor Antonieta nos ha invitado a mirar los recursos existentes, pero también los ámbitos de nuestra vida que necesitan particular revitalización, sugiriéndonos las actitudes a cultivar en los próximos días: escucha del Espíritu y disponibilidad de trabajar juntas.
Con este espíritu hemos transcurrido la tarde, escuchándonos y confrontándonos sobre las tendencias emergentes en el contexto socio-cultural-religioso-comunicacional en el que estamos y trabajamos. La jornada de mañana también será dedicada a esto. En cambio, la noche ha sido alegrada por las hermanas de la Provincia PMPT que, con extraordinaria creatividad, nos han presentado la belleza cultural y el espíritu de fiesta y de acogida de su tierra.